Las lesiones directamente relacionadas con las tareas laborales son una preocupación muy seria para muchos empleados. Estas lesiones pueden ser la causa directa de un accidente en particular o de ciertos movimientos repetitivos propios de una labor. Para poder realizar un reclamo, es fundamental establecer una relación entre el trabajo y las lesiones sufridas.
Para demostrar que tu trabajo fue la causa o contribuyó a tu lesión, hay que presentar evidencia sólida que incluye, pero no se limita a:
Reportar la Lesión de Inmediato
Notificar a tu empleador tempranamente crea un registro oficial del incidente y la lesión. También mantén un registro de toda comunicación que tengan sobre el tema.
Buscar Atención Médica
Luego de la lesión, o en cuanto aparezcan las molestias en caso de no ser un accidente específico, busca atención médica para que diagnostique y documente tu estado físico. Siempre recuerda informar que se relaciona con tu trabajo para que quede asentado en tu historial médico y pide copias de ellos.
Registrar los Detalles
Siempre es recomendable llevar un registro detallado de cómo y cuándo ocurrió la lesión, así como cualquier comunicación con tu empleador relacionada con la misma.
Testigos
Si alguna persona fue testigo del accidente o de las condiciones laborales que lo causaron, pide que realicen su declaración por escrito para respaldar tu reclamo.
Consultar con un Abogado
No solo es necesario si te enfrentas a dificultades para demostrar la relación entre tu trabajo y la lesión, un abogado de compensación laboral puede ayudarte durante todo el proceso y mejorar tus posibilidades de obtener justicia.
Sabemos que en muchos casos demostrar que tu trabajo contribuyó a tu lesión puede ser un proceso complicado, por eso tener un registro de todo lo sucedido te brinda una evidencia sólida, que es la clave de tu caso. Sin importar qué tan insignificante creas que sea, cuantos más documentos y registros que respalden tu reclamo tengas, más sólido será tu caso.
